Hace mucho tiempo, en una universidad muy, muy lejana, cinco personas coincidieron en la misma clase del Grado de Español: Lengua y Literatura. Tenían muchas cosas en común: Ávidos lectores desde pequeñitos, les gustaba escribir, adoraban la fantasía y la ciencia ficción... En definitiva, una panda de frikis cuyas rarezas encajaban como las piezas de un puzzle.
Un buen día, de esos en los que se está tan a gusto en la cafetería de la facultad que no apetece ir a clase, Sandra nos dijo esa frase mágica que da inicio a todas las grandes aventuras: He tenido una idea.
Nos gustaba escribir, nuestros gustos eran muy parecidos, la idea tenía MUY buena pinta... ¿qué podía salir mal?
Quiero decir, ¿quién puede resistirse a este aesthetic? |
Así es como nació Batalla por el Olimpo, un proyecto que por aquel entonces ni imaginábamos lo titánico que iba a hacerse. Terminamos la novela, la corregimos sin matarnos los unos a los otros en el intento y, a pesar de ello, nos juntamos para escribir la segunda parte.
Pero ¿quién es ese "nosotros" del que hablo? Tras mucho cavilar, el nombre que escogimos como grupo fue el de Escuadrón 42, porque era el que más nos definía (y porque el 42 es la respuesta a todas las preguntas del universo, nos lo dijo un autoestopista galáctico). Está formado por la gente más loca y maravillosa con la que podría desear meterme de lleno en un proyecto tan loco y maravilloso como ellos: Carmen, Sandra, Mey, Francisco y, claro, una servidora.
Tenemos cara de no haber matado un personaje en nuestra vida, ¿a que sí?
Cuando terminamos no sabíamos qué hacer. Creo que todos nos quedamos con un gusanillo en nuestro interior, dos fuerzas enfrentadas: el miedo por que nuestra obra se hiciera pública y la emoción por lo que podría suponer. Solíamos bromear sobre lo que diríamos en las presentaciones, sobre cómo sería nuestro libro publicado... Hasta que fuimos al Festival Celsius 232, y se sembró una semilla: "¿y si...?". Un día, vimos que una editorial tenía abierta la recepción de manuscritos y dijimos: ¿y por qué no?
Hay que decir que cuando enviamos el manuscrito de las dos partes teníamos asumido que la respuesta iba a ser un "no". Porque éramos muchos autores, porque la obra estaba muy verde (después de mil correcciones, el síndrome del impostor es un graciosete), porque la historia tiene partes muy duras...
Y entonces llegó un email de Insomnia Ediciones. Personalmente, tuve que leer el correo varias veces para creerme lo que estaba pasando, y aun así no fui consciente de ello hasta que May, la editora y Bruja Jefa, nos dijo en la reunión que quería Batalla por el Olimpo en su catálogo. Le había gustado tanto el proyecto que hasta el impostor, que siempre aprovecha cualquier oportunidad para fastidiar, tuvo que reconocer que quizá lo que teníamos entre manos era incluso más grande de lo que pensábamos.
Y así, Batalla por el Olimpo desplegó sus alas.
En un futuro distópico, una enfermedad mortal obligó a la humanidad a dividirse en dos sociedades: la Clase Alta, habitantes de la isla flotante de Olympus, donde conviven con los Dioses; y los pobladores de la Suburbe, que deben trabajar duro para sobrevivir. Sin embargo, una vez cada veinte años sus vidas convergen con la llegada del Torneo: los Dioses no son inmortales, y los jóvenes elegidos de la Suburbe deben competir para reclamar un lugar en la isla.
Esta preciosidad de portada es obra de la artistaza Rosa Gutiérrez, estamos muy agradecidos por el trabajazo que ha hecho. |
Poco más me resta añadir, salvo que podéis conseguir Batalla por el Olimpo a través de la web de Insomnia Ediciones en este enlace. También podéis seguirnos en nuestras redes sociales, tenemos Twitter e Instagram.
Gracias infinitas a quienes habéis apoyado este proyecto, a quienes nunca dudasteis y a quienes han querido a estos personajes tanto como nosotros. Nos vemos en el Torneo.
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